martes, noviembre 08, 2005



IQUIQUE ZONA ESTRATEGICA

Para la elite del Mapocho todos los lugares geográficos que están fuera de su jurisdicción son territorios ajenos, si declaramos que somos procedentes de Tarapacá nos dicen que eso esta muy lejos, que somos el extremo norte. Esta idea ha sido apropiada por nosotros y nos comportamos como tal, esta noción esta arraigada en nuestra mentalidad y nos resulta difícil cambiarla, a tal punto que esperamos que venga la gente del centro a solucionar nuestros problemas.

El esfuerzo cognitivo que debemos realizar, cada uno, es mencionar : que lejos esta Santiago de nosotros. Están tan al extremo que ya se caen del mapa, han desarrollado tan pocas habilidades para comportarse en situaciones adversas que no comprenden la esencia de nuestros planteamientos. Estamos tan cerca de importantes centros de producción agrícola, que de no mediar medidas fito sanitarias un poco caducas, tendríamos diversas frutas todo el año y un precio mucho menor del actual y la lista puede ser más larga aún.

En las últimas semanas ha surgido el concepto de transformarnos en Zona Estratégica , la idea de que nuestra región debe sacarse el ropaje de zona extrema y constituirse en Zona Estratégica.

¿Qué tenemos para transformarnos en Zona Estratégica? La primera respuesta que hay que rechazar categóricamente y no aceptar es que no tenemos nada, esta respuesta nos ubica en el concepto de Zona Extrema y una primera característica de Zona Estratégica es no asumirse como un territorio alejado del centro, muy por el contrario es asumirse como centro, como un centro importante para el desarrollo, como centro desde el cual se construyen relaciones, como centro importante de articulaciones, como centro de inversiones, como centro de negocios. Desde este centro se construyen y reconstruyen las relaciones con los territorios cercanos a nosotros e incluso en una era de globalización, con territorios mas allá del océano.

Transformarnos en Zona Estratégica también significa que como territorio aportamos significativamente al desarrollo del país, que este ya no depende de lo que suceda o se decida en la Capital, nosotros somos capaces de generar tal dinámica que la descentralización ya no es una demanda, sino que es un realidad construida por nosotros mismos.

Desde este centro se establecen relaciones de cooperación e intercambio, nuestra región debe desarrollar su propia diplomacia con los vecinos, nuestro acercamiento con Perú y Bolivia debe posibilitar y ayudar al trabajo con la Cancillería Chilena para tener relaciones de cooperación con ellos, posibilitando el establecimiento de relaciones de confianza mutua.

El construirnos como centro no debe significar que olvidemos quienes somos, cuales son nuestras raíces y por ello la construcción de nuestra identidad regional es un proceso continuo que nos da un sello característico en la relación con los otros, pero que también nos permite incorporar elementos culturales proveniente de otros territorios, no hablamos de choque cultural, hablemos de relaciones multi culturales.

Pero lo más importante para construirnos como centro o como Zona Estratégica es saber cual es nuestro camino, cual es nuestro proyecto como sociedad tarapaqueña, hacia donde queremos ir, como esperamos insertarnos en un mundo globalizado con nuestra propia identidad. Si no sabemos donde queremos ir, será muy difícil transformarnos en Zona Estratégica.

El donde ir no es decisión de una elite, es una decisión colectiva, el construirnos como Zona Estratégica es también un desafío democrático.