martes, mayo 11, 2021

ELECCION DE GOBERNADOR REGIONAL ¿QUE ELEGIMOS?

 

Las modificaciones realizadas a la Ley Orgánica Constitucional 19.175 sobre Gobierno y Administración Regional, permitirá por primera vez en Chile, la elección del Gobernador Regional y con ello se marca el fin de los Intendentes Regionales nombrados por los respectivos presidentes.

Con la puesta en marcha de los Gobiernos Regionales, en un lejano 1996, los Intendentes Regionales tuvieron un doble rol, por una parte la función de gobierno interior y seguridad pública y por otro la de Jefe del Gobierno Regional.

La razón de ser de los Gobiernos Regionales es el desarrollo social, económico y cultural de la región y para el cumplimiento de este propósito dispone del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR).  

A contar del 16 de mayo del presente año, las funciones señaladas estarán radicadas en dos instituciones distintas.

Todo lo concerniente a la seguridad pública, gobierno interior, emergencias o catástrofes son tareas propias del Delegado Presidencial. Para ejemplificar esta situación mencionaremos el siguiente hecho que es de conocimiento público. Un nuevo ingreso masivo de extranjeros por alguna comuna rural de la región es un tema de gobierno interior y específicamente lo concerniente a migración. Enfrentar y resolver esta situación será responsabilidad del Delegado Presidencial y si dicha solución requiere de fondos, estos deberán ser solicitados al Ministerio del Interior.

Como lo señalamos, el propósito fundamental del Gobernador Regional es el desarrollo económico, social y cultural de la región.

Estos tres aspectos demandan un conocimiento profundo de la región y la definición de prioridades que el territorio de Tarapacá demanda para lograr su desarrollo o mejor dicho para una mejor calidad de vida.

Entre las principales funciones de los Gobiernos Regionales, el cuerpo legal señala:

·       Diseñar, elaborar, aprobar y aplicar las políticas, planes, programas y proyectos de desarrollo de la región en el ámbito de sus competencias, los que deberán ajustarse al presupuesto de la Nación y ser coherentes con la estrategia regional de desarrollo. Asimismo, en dicha labor deberá considerar los planes comunales de desarrollo. 

·       Efectuar estudios, análisis y proposiciones relativos al desarrollo regional.

·       Orientar el desarrollo territorial de la región en coordinación con los servicios públicos y municipalidades, localizados en ella.

·       Administrar fondos y programas de aplicación regional

 Establecidas las funciones y prioridades regionales, es posible establecer convenios de programación con los diversos servicios públicos y de esta forma robustecer el FNDR, en otras palabras es el Gobernador Regional quien deberá negociar con los diversos ministerios, los proyectos que interesan a la región.

Será responsabilidad del Gobernador Regional acordar Convenios de Programación Territorial, es decir la definición de prioridades y sus respectivos proyectos de inversión con el aporte financiero del Gobierno Regional, del respectivo ministerio y del municipio que será objeto de dicha inversión. Es decir, este tipo de convenio, va en directa beneficio de un territorio con la participación del Gobierno Regional, el respectivo municipio y el Ministerio relacionado con el tema.

Será el Gobernador Regional, a nombre del Gobierno Regional, quien deberá conocer y dialogar con las empresas privadas que realicen o quieran invertir en la región.

Estas breves tareas enunciadas demandan en primer lugar la definición del Modelo de Desarrollo que desea Tarapacá para sí mismo.

Esta tarea implica un amplio discernimiento y deliberación de toda la comunidad regional, la región debe definir el tipo de desarrollo que quiere para sí misma o dicho con otras palabras, que tipo de calidad de vida desean los tarapaqueños para la generación presente y futura.

Son estas definiciones de largo plazo, las que darán la pauta para solicitar las transferencias de competencias que el Gobierno Regional necesita para alcanzar su propósito y por esta vía poner coto a diversas transferencias que se desean transferir a los Gobiernos Regionales, cuyas características se asemejan más a procesos de desconcentración administrativa que auténticos procesos de descentralización.

El próximo 15 y 16 de mayo, elegiremos a una persona cuya mayor responsabilidad es conducir y liderar el desarrollo de Tarapacá.

 

 

OMAR WILLIAMS LOPEZ

SOCIOLOGO

 

 

miércoles, febrero 10, 2021

LA USURPACIÓN DE LA SOBERANIA

EN BUSCA DE LO PERDIDO

Las teorías políticas señalan que la soberanía popular de una nación o país emana y está radicada en el pueblo y en consecuencia todo poder viene de él.

Esta idea y práctica política no es nueva, podríamos señalar que su origen se remonta a fines del siglo XVIII a partir de dos hechos que cambiaran la sociedad de esos años y cuyos efectos impactaran los próximos dos siglos.

Nos referimos a la guerra de independencia de las colonias respecto al rey de Inglaterra, que hoy conocemos como Estados Unidos de Norteamérica, la segunda es la revolución francesa; ambas revoluciones tienen en común que los súbditos se rebelan contra el monarca, quienes ostentaban para si el ejercicio de la soberanía y que además esta era de origen divino, afirmación respaldada por las respectivas iglesias cristianas, ya sea la vertiente católica o protestante.

El éxito de estas dos revoluciones cambia radicalmente las relaciones de dominación que se daban hasta ese entonces y por estos hechos el súbdito se transforma en ciudadano y por este hecho la soberanía deja de tener origen divino y pasa a ser una soberanía del pueblo; el poder ya no radica ni emana del soberano, el poder radica y emana del pueblo.

Esto se traduce que el soberano, el pueblo, delega su poder en las personas que eligen de manera democrática, es decir, los presidentes, los senadores, los diputados, los alcaldes, los consejeros regionales y los concejales, actúan por un mandato delegado por el soberano.

Las consecuencias de las revoluciones de Estado Unidos y de Francia que trasformó al súbdito en ciudadano no llego en todo su esplendor a nuestro país y los países de América Latina. Estos conservan la política borbónica que viene de España, el virrey es el representante del Rey en un territorio especifico, delimitado, poseedor de atribuciones otorgadas por su “graciosa majestad” y no debe ni puede haber oposición a dichas atribuciones.

La elección por sufragio universal de las diversas responsabilidades públicas como presidente, senador, diputado, alcalde, Consejero Regional o concejales, no escapan a este sello borbónico, el electo está por encima de quien lo eligió y este es el primer acto de secuestro de la soberanía popular.

Todos ellos deben de dar cuenta de sus acciones a quienes le delegaron ese poder, esto, podrá ser leído por algunos como teoría o utopía, sin embargo, en la historia existen ejemplos concretos de que el soberano, el pueblo, no pierde el control de su delegación y que este control no es sinónimo de elecciones periódicas, sino de mecanismos de control efectivo por parte del pueblo soberano.

En nuestro país, la derrota de Pinochet en el plebiscito de 1988 fue gracias a una amplia movilización de la sociedad civil, expresada en la existencia de centrales de trabajadores, de ollas comunes, de jardines infantiles populares, de federaciones de estudiantes democráticas, de Asociaciones Gremiales de Educadores y un largo etcétera de organizaciones populares.

El triunfo del 88 fue el triunfo de las organizaciones populares y estas organizaciones entregaron su confianza en la Concertación de Partidos por la Democracia, este conglomerado fue depositario de la soberanía popular, volvamos a reiterar que un pueblo organizado es capaz de ejercer el control efectivo del poder que ellos mismos han delegado.

En el primer gobierno de la Concertación se van generando acciones cuya consecuencia es la destrucción de este entramado social.

Una acción de usurpación de la soberanía popular se materializó en el gobierno de Patricio Aylwin, quien a través del ministro Secretario General de Gobierno, solicita a todos los organismos de cooperación internacional que cesaran su ayuda a todas las organizaciones populares y Organismo No Gubernamentales (ONG) que existían en el país y que esta ayuda se canalizara al gobierno, quien la destinará al reciente creado Fondo de Solidaridad e Inversión Social (FOSIS)

La respuesta de la gran mayoría de los organismos de cooperación internacional fue que, dada la nueva situación de Chile, iniciarían su retiro programado de su apoyo a las ONG y organizaciones populares en un plazo de dos años como máximo.

FOSIS inicia a nivel nacional una serie de programas destinado a las organizaciones populares, como fue el programa Entre Todos, pero este es un fondo concursable, no es una asignación directa, las organizaciones populares que habían creado relaciones de apoyo, de cooperación y fraternidad se ven empujadas a competir entre ellas por dichos fondos, se inicia así la fragmentación del tejido social que había implicado años de construcción, que había superado detenciones, allanamientos, destrucción de enseres y viviendas, y asesinatos por parte de los esbirros de Pinochet.

 

Las agresiones al Feminismo

La primera manifestación anti dictadura emanó de las mujeres cuyos padres, esposos, compañeros o hijos habían sido ejecutados o se habían transformado en Detenidos Desaparecidos. Son estas mujeres las que perseveran en busca de la Verdad y la Justicia. ¿Cuál ha sido la respuesta de los presidentes de la Concertación a esta demanda?

Paralelo a esta lucha, son las mujeres, estudiantes, pobladoras y profesionales, las principales organizadoras y articuladoras de acciones solidarias, de la creación y   articulación de organizaciones de base que ya se han mencionado, es desde estos espacios donde surge el empoderamiento de las mujeres, las conversaciones, reflexiones y acciones feministas que van poniendo en evidencia a la dictadura.

Feminismo que se abre espacios en las diversas ONG, en los círculos de mujeres, en los espacios universitarios. Surgen los encuentros regionales de líderes mujeres populares, cursos y escuelas de líderes mujeres y una larga lista de iniciativas organizadas por y para las mujeres. En la lucha contra la dictadura se construye un nuevo modelo de mujer, protagonista, consciente de sus derechos. La idea fuerza que unifica estas legitimas expresiones es Democracia en el país y en la casa” instalando la demanda política de cambio profundo en la sociedad chilena, en los espacios de vida personal y en la vida pública.

Los temas del divorcio; del aborto, de los derechos de la mujer sobre su propio cuerpo y destino; de igualdad ante la ley de todos los hijos; el mal trato, los abusos y violaciones al interior de la propia pareja, ganan terreno y se abren nuevas discusiones, nuevas miradas, nuevas convicciones, nuevas acciones.

Frente a estos nuevos modelos de mujer, la dictadura se encarga de instalar otro modelo, insistiendo en la belleza física y en las acciones de voluntariado que implementan las “damas de Colores”. Por primera y única vez una chilena es elegida miss universo y su figura es repetida hasta la saciedad en todos los canales de TV, hasta el día de hoy. Más que a la justicia social este modelo insiste en el paternalismo y la caridad. Es el icono del modelo de mujer que quiere instalar la dictadura con todo su aparataje y control comunicacional de los medios de Agustín Edwards Eastman. Basta ver en los diversos medios de comunicación la publicidad de diversos productos de consumo banal para asociar a esa imagen de mujer construida durante la dictadura.

Posterior a esto, la constitución del Servicio Nacional de la Mujer fue la concreción de una exigencia de las mujeres que se materializó en el Caupolicanazo. Política pública para las mujeres fue el requisito para el apoyo a la candidatura de Patricia Aylwin. En un lejano 20 de agosto de 1989, la concertación de partidos por la democracia se compromete con las Mujeres de Chile.

Una vez elegido el primer Gobierno de la Concertación e instalado el SERNAM, la lucha feminista se ve enfrentada a otra imagen de mujer que se quiere imponer desde la nueva elite, es aquella que proviene del Instituto Carlos Casanueva, cuyo modelo es el rol secundario de la mujer y dedicada al cuidado de la familia.

Pero el movimiento feminista ya había levantado una idea fuerza que pone en jaque a la sociedad patriarcal, “Democracia en el país y en la casa”. Sin duda, el movimiento feminista, de mujeres diversas en Chile son un claro ejemplo de rescate de su soberanía y en los últimos treinta años ha debido soportar diversos embates, pero llegan otros rostros, nuevas ideas para hacer de Chile un país más humano. La posta en la lucha por derechos personales y ciudadanos de las Mujeres continua y por momentos está a la cabeza de reivindicaciones sociales, políticas y culturales del movimiento social.

Fueron y aún son muchas las acciones deliberadas cuya finalidad fue y es la Usurpación de la soberanía popular.

 

Otra Bofetada

El tejido social construido en dictadura como manifestación de resistencia y de ejercicio soberano, tuvo aliados importantes en la prensa alternativa, como son los casos de las revistas Análisis, Hoy, Cauce, Mensaje y APSI y de periódicos como Fortín Mapocho, La Época, Solidaridad y otros. Todos ellos ejercieron el periodismo investigativo para crear una conciencia analítica en los ciudadanos cuyo resultado era que la realidad que vivían era posible de transformar.

Sin embargo, el primer gobierno de la Concertación no brindó ninguna ayuda a estos medios, por el contrario, concentro el 80% de sus avisos en El Mercurio[1]  y a poco andar casi la totalidad de los medios desapareció, salvó revista Mensaje. De esta forma el diario de Agustín Edwards Eastman copo gran parte de la prensa escrita en nuestro país y con ello, muchas veces, construyó o incidió en la agenda pública.

Televisión Nacional con la llegada de la democracia, nunca recupero su rol de televisión pública y junta a ella, en todos los canales aparecieron los matinales y en las tardes los programas paternalistas de ayuda social y telenovelas de sufrimiento y amores pérfidos[2] llenaron las horas.

Esta estrategia comunicacional tenía como objetivo generar un pensamiento hegemónico, cuyo contenido era el no cuestionamiento al contexto social donde se desarrollaba la vida cotidiana de los chilenos, todos los mensajes escritos y audio visuales, además de los programas sociales impulsados por los diversos gobiernos, era la lucha individual para enfrentar los desafíos de la vida, el individualismo extremo llevado a su máxima expresión, a tal extremo que hoy en nuestro continente, nuestro país tiene el triste  porcentajes más altos de enfermedades mentales.

La tercera acción fue la imposición de un pensamiento hegemónico individualista, reduciendo drásticamente el sentido de pertenencia a un colectivo, a una comunidad[3] , la ruptura de las relaciones de confianza.

Esta forma de comunicación, expresada principalmente en los diversos canales de televisión, se ha maquillado con otras formas, pero su propósito sigue siendo el mismo. Ahora predomina la Farándula, el entretenimiento el cual degenera en una desconexión mental con el entorno, como lo sostiene Byung-Chul Han.[4]

A diario vemos la presencia de diversos políticos en los matinales, quienes no hacen referencia a las profundas transformaciones que necesita el país, muy por el contrario, se transforman, finalmente, en un producto comercial que debe gozar de enorme publicidad para que los ciudadanos nos convenzamos que debemos elegirlos o mejor dicho consumir la banalidad que nos ofrecen.

Estos mismos medios cumplen la función de transformar lo público en privado y lo privado en público. ¿Qué tan importante es la vida privada de “algún rostro” de la TV para las personas que hoy padecen las consecuencias económicas de la Pandemia del Covid- 19? De esta forma, y sobran los ejemplos, lo privado se transforma en público. ¿En qué momento los canales de TV han señalado el impacto de ganar cuatrocientos mil pesos mensuales de casi el 50% de los trabajadores de nuestro país? Lo que es un problema público, por el número de personas y familias afectadas, al no estar en las pantallas, no existe y con ello lo transforman, mediáticamente, en un problema privado, es problema del trabajador ganar ese sueldo, no son las condiciones sociales y económicas que impone la elite al resto de la población.

A las organizaciones sociales se les acoto sus espacios de intercambio y en su interior se estableció la competencia por recursos públicos, administrados por el concejal o por el consejero regional o por algún director de algún servicio público. Así, el ciudadano se transforma en clientela política, a disposición de la voluntad del soberano y las organizaciones iniciaron su camino de desaparición, atrás quedaron las reivindicaciones sociales, económicas o laborales.

Para Byung-Chul Han, existen dos formas de ejercer el poder.[5]

La primera de ella la identifica con el ejercicio de poder mediante una relación vertical, autoritaria y borbónica, con una notoria falta de dialogo, con la imposición de la voluntad de la autoridad por sobre la voluntad del ciudadano, se trata de someter la voluntad del otro, por parte de quien ostenta una posición de poder y cuyas decisiones no pueden ser puestas en dudas y tampoco interrogar sobre sus fundamentos, la lealtad se confunde con obsecuencia y en las relaciones de obsecuencia no existe el cuestionamiento y sí existe la falta de empoderamiento.

Este sometimiento utiliza diversos medios o herramientas coercitivas, como es negar recursos públicos o condicionar su asignación a una coima o a una prebenda, esta práctica reduce al ciudadano en súbdito.

Estamos frente a una verdadera pirámide de obsecuencia y de clientelismo, esto último basado en el aprovechamiento individual de los recursos públicos, las pocas organizaciones sociales existentes que forman parte del área de influencia de un concejal o de cualquier autoridad política, deben ser obsecuentes, pero a la vez este concejal o autoridad política, debe ser obsecuente respecto a quien está en el eslabón inmediatamente superior y este respecto al eslabón siguiente y así sucesivamente hasta llegar  finalmente a la elite, a la élite de verdad, la que capta para sí el 30% del Producto Interno Bruto del país, en otras palabras, el 1% de la población[6].

Para Byung-Chul Han, el poder no siempre se debe entender como coerción, el poder también es intermediación.

Recordemos que el conflicto es inherente a la sociedad, es decir siempre existirá el conflicto porque cada actor social busca representar, defender, expresar sus intereses y la búsqueda de solución de dichos intereses y cada actor social está conformado por ciudadanos. Este es el contexto que debemos analizar y entender porque el esfuerzo de reducir el empoderamiento de los ciudadanos, del ejercicio de su soberanía, es esta delegación de poder la que hoy se cuestiona en Chile, porque quienes fueron electos, recibiendo la delegación de soberanía otorgada por el pueblo, se transformaron en una clase que defiende sus propios intereses y abandonando la noción de poder como ejercicio de mediación.

El estallido social del 19 de octubre de 2019, puso de manifiesto el uso de la violencia por parte del presidente, pero el uso de la violencia es sinónimo de cero intermediaciones, es imponer por la fuerza su voluntad contra la voluntad de la gran mayoría de los chilenos y cuyo resultado fue la mutilación visual de jóvenes y personas, como Gustavo Gatica o Nabila Rifo.

Lo que las autoridades actuales entienden perfectamente es que la mediación otorga una mayor sensación de libertad, esa libertad que Eric Fromm definió como una conquista o lucha de los oprimidos por emanciparse de la dependencia que sufrían respecto de aquellos que gozaban de privilegios. Para Byung Chul Han: ser libre no significa otra cosa que realizarse mutuamente y esto es posible viviendo en comunidad, en relaciones sociales.

Lo que se ha pregonado de manera insistente es que la libertad es sinónimo de comprar lo que desee en un super mercado o en cualquier lugar de ventas y este es un discurso perverso porque vacía el cometido original de la libertad por una simple decisión de compra y lo que han hecho los canales de televisión en los últimos 30 años es incentivar el consumo.

Este concepto perverso de libertad, se trasladó a la política y específicamente a las diversas elecciones, estas últimas consisten en la oferta de los candidatos-productos que como tal debe ofrecer algunas bondades o cualidades, ideas generales, vagas, sin gran contenido o sustancia, se dicen cosas que la gente quiere escuchar: ¡Enfrentaremos decididamente la seguridad ciudadana! ¡Nuestra región será un ejemplo para el mundo! Y podríamos agregar un sinnúmero de frases carentes de sentido y de contenido.

Las elecciones han sido reducidas a un conjunto de ofertas y para ello se necesita financiamiento de estas campañas de vanidades y los candidatos comienzan a golpear diversas puertas a fin de obtener tan preciados recursos; son los grandes grupos económicos del país quienes deciden quienes serán los candidatos, las elecciones quedan reducidas a un simple rito ratificatorio por parte de los electores, quienes al percibir que sus demandas no tienen respuestas, optan inicialmente por la abstención, por la desafectación por la política y finalmente por la ausencia de compromiso cívico.

Este hecho es aprovechado por la clase política y en estas condiciones promulgan el voto voluntario, ya no importa el número de ciudadanos que concurren a una elección, lo importante es cumplir con el rito de la elección y ser electo con por un número reducido de votos.

Bajo esta lógica la acción política se refugia en lo legal, desdeñando la legitimidad de sus actos, lo importante es actuar bajo el prisma de lo legal, aunque esto este vetusto, la dinámica de la realidad social, que es siempre dinámica, es encajonada en lo legal, si la realidad no se ajusta a lo legal, peor para la realidad.

Actuar desde lo legal, prescindiendo de la legitimidad, tiene dos efectos. Por un parte anula el conflicto ético en la toma de decisiones y consolida el pragmatismo más absoluto, frente al cual Maquiavelo palidece.

 En este contexto, todo candidato que propone ideas, programas o proyectos de sociedad que pone los puntos sobre las i, corre con desventaja porque los votantes han devenido en simples consumidores.

Reducidos los ciudadanos a simples consumidores, la soberanía queda usurpada por la elite que ha creado todas estas condiciones sociales y culturales que les permite ejercer el poder sin ningún control ciudadano porque instalados en el Congreso, el lugar donde se legisla, su accionar los consolida como clase política.

Esta clase política que depende de la oligarquía económica, inicia un control inexorable de todas las instituciones de la república. Si un contralor regional quiere llegar a los estamentos más altos de su institución, debe obedecer lo que un parlamentario le sugiere o propone; algo semejante ocurre con el poder judicial, para llegar a ser fiscal nacional es necesario reunirse con senadores de todas las tendencias y sin duda hacer promesas que garanticen los privilegios o prebendas.

 

 

Esta clase política pervirtió al Servicio de Impuestos Internos, frente a las denuncias de financiamiento ilegal de campañas políticas, no presentó denuncias contra empresas o parlamentarios y así la vida, para ellos, volvió a la normalidad.

El conflicto social es inherente a toda la sociedad y expresa la confrontación de interés opuestos al interior de toda sociedad, manifestada por los diversos actores sociales. Quien debe resolver este conflicto es la política y el espacio de solución es el Congreso, pero como hemos sostenidos, la clase política no procesa, ni busca soluciones a los conflictos sociales del país.

No es cierto su frase “No lo vimos venir”, cuando se refieren al estallido social de octubre del 2019, tenían todo el conocimiento necesario provenientes de informes de organismos internacionales y nacionales, pero en no hicieron nada para mejorar la calidad de vida del 90% de la población chilena, tal vez la frase más honesta es: No nos interesan las condiciones de vida de la gran mayoría de los chilenos.

 

¿Cómo recuperar la soberanía popular?

Plebiscitos

 La posibilidad de escribir una nueva constitución, abre la posibilidad de introducir mecanismos que permitan el control ciudadano del ejercicio del poder.

¿Por qué el acuerdo del 15 de noviembre del 2019 no estableció el plebiscito como forma para resolver los desacuerdos en la nueva constitución y estableció el veto del tercio? La respuesta a esta interrogante es simple, el acuerdo se elaboró bajo la lógica de la clase política, para quienes en ejercicio de los derechos políticos de los ciudadanos es una contrariedad.

En la nueva constitución se deben establecer los Plebiscitos como un instrumento de consulta a los ciudadanos sobre los grandes temas del país; esto permite que las ideas se expresen, se confronten y cada ciudadano llegue a sus propias conclusiones y emita su sufragio; los temas que marcan la construcción del tipo de sociedad que deseamos ser, no puede estar en manos de 198 parlamentarios.

Veamos algunos ejemplos. Hoy la ratificación del acuerdo denominado TPP-11 (Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica) debería ser plebiscitado y no estar sujeto a la aprobación del Congreso.

A lo anterior deberíamos agregar una larga lista de temas que deberían ser plebiscitados, tales como una nueva ley de aborto, la propiedad de las aguas, el control de nuestros recursos naturales, etc.

 

Autonomía Real de los Poderes

Los diversos órganos del Estado deben ser independientes unos de otros, así se señala en la actual constitución, pero eso no es cierto. El hecho que el Congreso deba ratificar el nombre del Fiscal Nacional a propuesta de quien ejerce la presidencia, hipoteca la autonomía de dicha institución, lo mismo sucede con la designación de los jueces. El poder judicial debe ser autónomo en la designación de sus mas altas responsabilidades y no estar sujetos a la aprobación de los políticos.

Esto también aplica al Tribunal Constitucional, si es que sigue existiendo, no es posible que su constitución este en consonancia con las mayorías políticas coyunturales, en los últimos años ChileVamos a recurrido a esta instancia cuando son derrotados en el Congreso, sabiendo que tienen mayoría en su composición y además el voto dirimente lo emite el presidente que es nombrado por el presidente de la república.

Todo organismo fiscalizador debe ser autónomo y sus directores nacionales deben provenir de la misma institución, no más directores del Servicio de Impuestos Internos o de Contraloría nombrados por el presidente de turno.

 

Los Ciudadanos Eligen

Hasta septiembre de 1973 en nuestro país existían las elecciones complementarias y esta se efectuaba por el fallecimiento de un parlamentario y eran los ciudadanos quienes volvían a las urnas.

¿Cuántos votos obtuvo el actual senador UDI Claudio Alvarado? Cero votos de los ciudadanos, fue nombrado por la directiva de su partido en reemplazo del ex senador Víctor Pérez, quien renuncio para asumir como ministro del Interior.

Una situación similar ocurre con el ahora ex senador Felipe Harboe del PPD, quien renunció al senado para ser candidato a Constituyente, en su reemplazo la directiva del PPD nombro a la Señora Loreto Carvajal, diputada en ejercicio y en reemplazo de esta, a la Señora Patricia Rubio, quien obtuvo cero votos de los ciudadanos. Este es un ejemplo explícito de como la clase política ha usurpado la soberanía de los ciudadanos.

En la nueva constitución se debe explicitar que toda renuncia a un cargo de elección popular, corresponde una elección complementaria y así evitar que existan parlamentarios que no han sido electos por los ciudadanos.

 

 

 

Solo una reelección

La constitución de un grupo que defiende sus propios intereses, en el ámbito político, se transforma en clase política porque a la vez generará sus propios mecanismos para continuar en ese lugar de privilegio.

Todo cargo de elección popular puede ser reelecto sólo dos veces; hace algunos meses el actual congreso aprobó que los alcaldes, diputados y senadores solo pueden optar al mismo cargo en dos oportunidades, esta disposición también debe ser extendida a los consejeros regionales y a los concejales es necesario evitar la constitución de grupos que terminan apropiándose para si de los espacios políticos generados por los ciudadanos.  

 

Cambio en el sistema electoral

El actual sistema electoral que rige en Chile se denomina Sistema D’Hondt o Sistema de Cifra Repartidora; este método consiste en establecer la cifra repartidora que obtiene cada lista en competencia y estos hace que opera con la primacía de la lista de candidatos y su resultado es que el candidato más votado puede transferir votos a personas que no han sido de preferencia de los ciudadanos, mientras que candidatos con más votos no son electos.

Este sistema de votación también contribuye a la usurpación de la soberanía.

En muchas partes del mundo no se aplica este sistema y los ciudadanos votan por un conjunto de candidatos, veamos algunos ejemplos.

En muchos países de Europa y Estados Unidos los ciudadanos emiten sufragios por el número total de escaños en disputa, si se trata de la elección del Consejo Municipal, el cual contempla 10 concejales, los ciudadanos votan por 10 personas de las distintas listas y son electos los 10 más votados.

Una variante de esta situación consiste que en algunos municipios o condados, los ciudadanos eligen entre el 80 o 70 por ciento del consejo, en nuestro ejemplo significa que votan por siete u ocho candidatos, pero el resultado es el mismo: son los ciudadanos quienes eligen el consejo y no un sistema que discrimina a los candidatos más votados, esta fórmula permite a la vez que candidatos independientes o mejor dicho sin el patrocinio de un partido político, participen en igualdad de condiciones; hoy la cancha esta rayada en favor de los partidos.

Otro cambio que se debe implementar es a segunda vuelta para todos los cargos unipersonales, en la actualidad solo hay segunda vuelta para la elección de presidente de la república.

Este procedimiento debe ser aplicable para la elección de Gobernador Regional y de alcalde, así se evita que una minoría llegue a ocupar los cargos de alta responsabilidad pública que tienen que ver directamente con las condiciones de vida de los ciudadanos.

Hoy en nuestro país las elecciones primarias han devenido en un rito intranscendente que solo moviliza a los militantes de los conglomerados políticos, la participación del resto de los ciudadanos es muy baja. El resultado de esta práctica es que algunos son candidatos a cargos de alcalde o gobernador regional con poco más de 1.500 votos.

El ejercicio de los derechos políticos de los ciudadanos se debe materializar en la constitución de las segundas vueltas en todas las elecciones; esta fórmula evitaría las guerras intestinas al interior de los propios partidos, cuya consecuencia ha sido la constitución de grupos al interior de todos los partidos sin excepción.

Así cada alianza política presenta para decisión de los ciudadanos una lista de candidatos y pasan a segunda vuelta los dos candidatos más votados de cada pacto político.

Imaginemos la siguiente situación para la próxima elección presidencial:

Alianza por Chile

-        Joaquín Lavín por la UDI

-        Ignacio Briones por Evopoli

-        Mario Desbordes por RN

Ex Concertación

-        Alberto Undurraga por la DC

-        Heraldo Muñoz por el PPD

-        Paula Narváez por el PS

Acuerdo PC -FRV- FA

-        Daniel Jadue por el PC

-        Jaime Mulet por el FRV

Las dos más altas mayorías son Ignacio Briones y Daniel Jadue, estos dos candidatos pasan a segunda vuelta y son los ciudadanos quienes han decidido en todo el proceso.

 

 

 

 

 

Reinvención de los Partidos Políticos

La crisis de los partidos políticos no es exclusiva de Chile, la era de la información, como lo señala el sociólogo español Manuel Castells[7], implica que la sociedad avanza rápida e inexorablemente a una primacía de las redes sociales y este hecho cambia radicalmente nuestras formas de comunicarnos y de percibir la realidad.

Hoy cada uno de nosotros esta expuesto a un sinnúmero de información y datos, pero el efecto más notorio es la horizontalidad de las relaciones, las jerarquías comienzan a derrumbarse y la demanda de transparencia aparece en todos los horizontes.

¿Seguirán funcionando los partidos políticos a la usanza del siglo XX? Si este es el camino elegido, su derrumbe conlleva a un vacío de poder.

Si los partidos continúan actuando como lo han hecho a comienzos de este siglo, es decir oficinas de los grandes grupos económicos, la demanda por transparencia los hará desaparecer.

Porque paralelo a esta dependencia de los partidos a los grandes grupos económicos, se instaló un empoderamiento de la ciudadanía que no solo demanda el ejercicio de sus derechos políticos, sociales y económicos, también el respeto por el medio ambiente y un avance inapelable del feminismo; todo lo cual transforma radicalmente la vida cotidiana de   todos nosotros.

El derrumbe de los partidos parece estar a la vuelta de la esquina, pero aproximadamente en más de cinco mil años de vida humana, los partidos representan un espacio de no más de 200 años y en consecuencia es muy probable que nos enfrentemos a una reinvención de la política y de las formas de organizar la política.

Cada día hay más señales que avanzamos a una sociedad no jerarquizada y cuando nos demos cuenta de ello, tendremos que mirar a los habitantes de walmapu, quienes organizaron su sociedad de manera no jerarquizada, hace más de 500 años.

 

 

OMAR WILLIAMS LOPEZ

SOCIOLOGO



[1] Victor Herreros: Una biografía desclasificada del dueño de El Mercurio. Editorial Debate, año 2014.

[2] La canción de Sol y Lluvia, Un largo tour, sigue vigente.

[3] Zygmunt Bauman, En Busca de la Política. Fondo de Cultura Económica, 2007.

[4] Byung-Chul Han, Buen Entretenimiento. Herder, segunda edición 2019.

[5] Byung-Chul Han, Sobre el Poder. Herder, primera edición 2016.

[6] Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo, Informe Desiguales, la brecha social en Chile, 2017.

[7] Manuel Castells: La Era de la Información: Economía, Sociedad y Cultura. Siglo XXI, 2004.

viernes, enero 04, 2019

DE LA VIOLENCIA A LA TOLERANCIA. EL LEGADO DE CAMILO CATRILLANCA.



 En los últimos años y especialmente a través de los medios de comunicación, sin excepción, se viene construyendo un discurso que define la violencia como la agresión física de una persona o un grupo hacia otra persona o grupo. Esta forma de definir la violencia es sin duda acotada y limitante, ya que, al transformarse en discurso oficial, invisibiliza otras violencias que existen en nuestra sociedad.

Este mismo discurso rápidamente a instalado la violencia como sinónimo de terrorismo y sin duda esta afirmación implica una connotación política, el miedo en su aceptación más extrema es la instalación del terror como forma de gobernar, lamentablemente la historia de la humanidad está llena de estos ejemplos y nuestro país no constituye una excepción.

Estos mismos discursos oficiales, independiente del color de quienes lo propagan, vienen pregonando que en Wallmapu hay terrorismo, el actual presidente de la república, en su entrevista en canal 13 el día 26 de Diciembre del año 2018, aseveró que se han quemado iglesias con mujeres y niños en su interior, lo que fue refutado por uno de los periodistas presentes, pero ¿esta afirmación fue casual? O más bien, ¿se pretende instalar el discurso oficial como verdad oficial y en consecuencia irrefutable?
Pero ¿Es verdad que existe terrorismo en Wallmapu?

Para responder a esta pregunta, lo primero que tenemos que indagar es ¿Qué entendemos por terrorismo?

Debemos concordar que la violencia posee en si misma diversas manifestaciones, pero generalmente la asociamos a la agresión física que una persona ejerce sobra otra y nos olvidamos de otras formas de violencia que se han hecho tan habitual en nuestra sociedad contemporánea que lo asumimos como un acto normal, tan normal que nos agredimos a nosotros mismos, como lo sostiene Byung Chul Han[1].

Para el geógrafo político David Slater el Terrorismo lo define como transferir a otros nuestros valores y prácticas porque las consideramos superiores a los de otros.

Negar la condición humana a otro ser humano y por esta vía arrancarle sus derechos inalienables constituye en sí mismo un acto de violencia. Cuando este hecho es masivo en la sociedad, hablamos de terrorismo de Estado, característica de toda dictadura.  

Roger Bastide en su libro El Prójimo y El Extraño, se preguntó cómo fue posible que un grupo de no más de 300 españoles fueran capaces de apropiarse de un imperio tan basto y complejo como lo fue el Imperio Inca.

La clave para este autor fue que el Inca, era para su pueblo un ser sagrado, descendiente de Wiracocha, y en consecuencia instalado como columna vertical del ethos y la cosmovisión del mundo incaico.

¿Cómo podemos calificar el acto por el cual Francisco Pizarro decide terminar con la vida de Atahualpa? ¿Fue un crimen político? ¿Fue un asesinato a mansalva? O ¿Fue un acto terrorista?
Lo que vivieron los súbditos del Inca fue un verdadero terror, sucedió lo que nunca pensaron que sucedería, el descendiente de Wiracocha asesinado en la plaza pública. A partir de ese momento todo se derrumbó, su cosmovisión entró en una profunda crisis perdiendo el sentido de su existencia, éticamente vacíos, el terror se apropió de sus vidas, quedaron en la vulnerabilidad más absoluta, lo que se tradujo en la más abyecta dominación por parte de los españoles. Este terror se transformó en un miedo inhibidor, limitante y aprehendieron cuan bárbaro puede ser el extraño.

Los dominadores recién llegados expropiaron sus tierras y sus ganados, crearon las mitas y las encomiendas, y los indios transformados en esclavos.

Todo su universo significativo, todo su simbolismo fue declarado herejía o brujería y todo el saber ancestral conoció la hoguera, ya fuesen sus códices o las personas capaces de escribir y leer esas claves.

Para el recién llegado no fue suficiente la derrota política y militar, era necesaria la destrucción de todo su simbolismo, se aplicó una violencia simbólica.

Desde el punto de vista de los pueblos ancestrales, la conquista española fue un acto terrorista y por ello, pese a los siglos transcurridos, las cartas de Fray Bartolomé de las Casas, dirigidas al rey de España, continúan siendo una prueba de dichos actos bárbaros.

Estas cartas reflejan la ideología del conquistador de no considerar al extraño, al prójimo, en definitiva, al indio, como un ser humano. Si se le negaba esta condición podría ser objeto de las más brutales explotaciones y aberraciones que un ser humano puede acometer contra otro ser humano. Por el contrario, si era un ser humano, tenía la misma condición que el conquistador y no podía ser objeto de ignominia.  
Para todos los pueblos ancestrales de América, la tierra constituye el eje central de su actividad económica y de su espiritualidad, por ejemplo, los aimaras la denominan Pachamama, madre tierra, porque todo provine de ella.
Esta concepción de la tierra la expresa el Jefe Seattle en su carta al presidente de EE. UU:
¿Cómo se puede comprar o vender el cielo o el calor de la tierra?, esta idea nos parece extraña.
Si no somos dueños de la frescura del aire, ni del brillo del agua, ¿Cómo podrán ustedes comprarlos? Cada pedazo de esta tierra es sagrado para mi pueblo, cada aguja brillante de pino, cada grano de arena de las riberas de los ríos, cada gota de rocío entre las sombras de los bosques, cada claro en la arboleda y el zumbido de cada insecto son sagrados en la memoria y tradiciones de mi pueblo. La savia que recorre el cuerpo de los árboles lleva consigo los recuerdos del hombre piel roja.
Esta concepción del mundo y del universo esta en la filosofía mapuche, constituyéndose en uno de sus ejes fundamentales.

¿Qué buscó finalmente la mal llamada pacificación de la Araucanía?

No fue una propuesta de comprar sus tierras, fue simple y lisa y llanamente una usurpación de las tierras de los mapuches, Wallmapu fue invadido por el Estado chileno, violando el acuerdo de Tapihue y esta invasión se sostuvo por el tipo de armamento que poseía el ejército chileno que los mapuches no estaban en condiciones de equiparar.

Pero no sólo estuvo la expropiación de tierras, estas fueron acompañadas por verdaderas campañas de genocidio encabezadas por Cornelio Saavedra, Domingo Salvo, Vicente Villalon, Mauricio Barbosa, todos ellos mencionados en el libro Crónica Militar de la Conquista y Pacificación de la Araucanía[2].

Cosechas arrasadas, matanza de sus ganados, asesinatos masivos de comunidades completas. ¿Qué es esto? ¿Una guerra declarada unilateralmente, por el Estado chileno, contra un pueblo que carecía de armas para enfrentarlo o fue una seguidilla de actos terroristas?

Pero también hay una violencia simbólica permanente, aquella que niega los nombres originales, sustentados en la toponimia proveniente de los pueblos ancestrales. Estos son cambiados por otros nombres muchos de los cuales se instalan simbólicamente para recordarles que no son un pueblo libre, el ejemplo más alevoso es Puerto Saavedra.

Todos estos actos fueron cometidos por agentes del estado que actuaron por ordenes de los respectivos presidentes o ministros del Interior; lo que se vivió y vive hoy en Wallmapu, son actos terroristas por parte de agentes del Estado contra la nación mapuche, ¿Qué otra explicación tiene el asesinato de Camilo Catrillanca? Y junto a él una larga lista que ya nos debe resultar vergonzosa.

El discurso oficial insiste majaderamente en actos de violencia en Ercilla que proveniente de parte de integrantes de algunas comunas mapuches, pero basta leer la novela de Jorge Volpi cuyo título es Una Novela Criminal, basada en un hecho real, para comprender que la complicidad entre los diversos poderes, con una policía corrupta y con medios de comunicación al servicio de estos poderes, pueden condenar a los comuneros o a sus comunidades, sin importar si son inocentes.

Tal vez en Chile, alguien como Volpi, podría escribir una novela titulada “Operación Huracán”
¿Qué riqueza esconden las tierras de temucuicui que son objeto de terrorismo de estado?  ¿Qué empresario quiere extender sus negocios a costa de las tierras de los mapuches?

Al conmemorarse los 100 años de la Matanza de la Escuela Santa María, el entonces ministro del Interior, Señor Belisario Velasco, pidió perdón a Iquique y a los trabajadores por la masacre perpetrada contra los obreros del salitre por militares del Estado chileno.

¿Cuánto tiempo debemos esperar para que el Estado de Chile, reconozca y pida perdón por los asesinatos de comuneros mapuches?

¿Cuánto tiempo debemos esperar para que el Estado de Chile reconozca la existencia de la nación mapuche y de otros pueblos originarios?

Podemos ser un solo país con diversas naciones en su interior, esto nos engrandecería  porque la discriminación daría paso a la Tolerancia como valor fundamental de nuestra sociedad.




Omar Williams López
Sociólogo



[1] Byung-Chul Han, Topología de la Violencia.
[2] Leandro Navarro Rojas, Crónica Militar de la Conquista y Pacificación de la Araucanía.